El cultivo de lupino, una leguminosa de grano comestible catalogada como un superalimento, se muestra como una opción prometedora que podría resultar una alternativa novedosa, ecológica y rentable para el sector productivo agropecuario de la Región de Coquimbo.

Entre los principales problemas y desafíos que enfrenta la producción del sector agropecuario de la Región de Coquimbo se encuentran la baja eficiencia en los procesos productivos, la necesidad de diversificación, el dar valor agregado de los cultivos y la demanda creciente de fuentes de proteína de origen vegetal tanto para el consumo interno en el país como para la exportación al mercado europeo.

Por estas razones, es necesaria la búsqueda e implementación de nuevos cultivos capaces de satisfacer dichas necesidades. El cultivo de lupino, una leguminosa de grano comestible catalogada como un superalimento, se muestra como una opción prometedora que podría resultar una alternativa novedosa, ecológica y rentable para el sector productivo agropecuario de la región.

La Universidad de La Serena (ULS), a través de un proyecto del Fondo de Innovación para la Competitividad, FIC-R, se encuentra evaluando el potencial de aclimatación del lupino amargo (lupino blanco y andino), lupino dulce (lupino blanco dulce y lupino azul) y lupino silvestre (lupino nativo de Chile) a las condiciones agroclimáticas de la Región de Coquimbo. El objetivo del proyecto es proyectar a la región como productora de lupino para satisfacer la demanda tanto interna como la externa de este y además explotar sus beneficios para la rotación de cultivos y recuperación de suelos degradados.

“Consideramos que tanto los pequeños y medianos agricultores de la Región de Coquimbo se verían altamente beneficiados con la inserción del cultivo de lupino en la región”, explicó el Dr. Cristian Salgado, académico del Instituto Multidisciplinario de Investigación y Postgrado de la ULS, quien forma parte del equipo a cargo del proyecto junto a la Dra. Patricia Guerra (ULS), MSc. Gerardo Gutiérrez (ULS), MSc. Daniel Piñones (ULS), ing. Pablo Martínez (ULS) y MSc. Cornelio Contreras (INIA Intihuasi).

El equipo plantea evaluar el rendimiento y desarrollo del lupino en un campo de cultivo del predio Pan de Azúcar del Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA Intihuasi), en el valle del Elqui (El Almendral) y el Liceo Presidente Eduardo Frei Montalva de Monte Patria. Este experimento se replicará bajo condiciones de invernadero en la Universidad de La Serena. El cultivo será sometido a riego diferenciado siendo el óptimo el usado en la Región de la Araucanía. Además, se evaluará el potencial del lupino para recuperar suelos degradados y se implementará un sistema de rotación con el cultivo de pimiento que se realizará en el valle del Elqui.

Actualmente se ha concretado la primera etapa del proyecto con la implementación del riego diferenciado (riego por goteo) en la parcela Pan de Azúcar del INIA, siembra del lupino blanco (amargo y dulce) y azul y el inicio de las mediciones relacionadas al desarrollo del cultivo. Las mediciones se realizarán hasta la cosecha del grano por todo un ciclo de cultivo (10 - 11 meses)” señaló el Dr. Salgado, quien complementó que el equipo ya ha realizado viajes a las zonas de estudio para sostener reuniones con los colaboradores del proyecto, además de las evaluaciones necesarias para implementar el cultivo.

Los investigadores destacan que el cultivo de lupino puede considerarse una alternativa ecológica para la agricultura, ya que, al ser utilizado en sistemas de rotación de cultivos, permite prescindir de fertilizantes sintéticos para enriquecer el suelo en cultivos posteriores, disminuyendo así los efectos ecológicos negativos producidos por el uso indiscriminado de químicos. Y agregan que los bajos costos de producción en comparación a otros cultivos, permite inferir que el cultivo de lupino podría favorecer la situación socioeconómica de agricultores que practican una agricultura familiar en condiciones agroclimáticas adversas en términos de disponibilidad de agua y suelos degradados.

El proyecto ya ha sido presentado oficialmente en la ULS, contando con una alta participación tanto de autoridades universitarias y de la Región de Coquimbo, investigadores, académicos, estudiantes de postgrado y de educación media.

El lupino

Cabe señalar que, en Chile, el lupino se cultiva casi exclusivamente bajo las condiciones agroclimáticas de la Región de la Araucanía. Las principales variedades de lupino que se cultivan corresponden a las especies dulces de lupino blanco y azul, las cuales son comercializadas en el mercado interno, principalmente como suplemento alimenticio de animales de granja y para la salmonicultura; mientras que las variedades amargas de lupino blanco, cultivadas por pequeños agricultores de la región de la Araucanía, son mayormente exportadas al mercado europeo para consumo humano.

Además, existen otras especies de lupino que, por sus características nutricionales y su tolerancia a la sequía, han sido propuestas como blanco de investigación para el país. Ejemplos de ello, son el lupino andino, una especie utilizada principalmente para la alimentación humana en países como Ecuador, Perú y Bolivia, y el lupino nativo que crece en bordes de carretera, suelos de cultivo y suelos degradados de la Región de Coquimbo.